Al cocinero lo tienen bajo la lupa
¡Ayyy! Cuidao que al Ratatouille sinvergüenza se le quema el pan en la puerta del horno. Dicen que hay un expediente X que lo tiene listo y frito, o sea, bajo la lupa de las autoridades, quienes están a la espera de que alguna de las señoritas, a las que le mandaba videitos sabrosones, lo denuncie. Nos cuentan que allá lo están esperando con cubiertos en mano para probarle su Penne a la Putanesca y su Mondongo a la Culona.
Le cuida el chigüí al maridito
Esta mujercita que no come hierba porque el pescuezo no le da, se empeña en mirar para el otro lado con tal de seguir junto a ese macho. Parece que él tiene campanita o no se qué, porque por más que medio Panamá le dice, en su cara, que se compre dos dólares de dignidad, prefiere quedar como vená consciente y seguir en su mundo de fantasías. ¡Ujum! Nos surte la billetera que ni al baño lo deja ir solo y que se le ha pegado como chicle a todas las actividades del trabajo para que no se la haga otra vez. ¡Pobrecita!
¡Ayyy! Lo dejaron por gordo y viejo
Mi amor, es que eso de que gallina vieja da buen caldo no aplica para los pollos. ¡Qué pena! Y es que eso lo sabía el biscochito que tenía al lado, quien prefirió cambiarlo por un pollito fit, así bien caché bombita. Lo que pasa es que este mentiroso se puso gordo y feo y ya ni siquiera las pastillitas milagrosas le sirvieron para bajar la panza y quitarse las celulitis de encima. Y eso que él le daba manso bombo, la pifiaba y todo, pero cuando ya el gallo no sirve ni pa cantar las mañanitas, la gallina va poniendo huevos en otro gallinero y el nuevo gallito, más bien, pollo, está riquísimo.